A falta de un año para el inicio del Mundial de rugby 2011, Nueva Zelanda aparece como la gran fravorita entre las principales naciones de la cita que recibirá, mientras que Argentina llegará a ese torneo planetario con el orgullo obtenido tras su tercer puesto en Francia-2007.
- Argentina:
La selección argentina acudirá a Nueva Zelanada orgullosa por su sorprendente tercera posición en el Mundial de 2007, que se desarrolló en Francia, donde juegan la mayoría de los componentes de los 'Pumas'.
El equipo tendrá que defender la categoríá alcanzada en tierras galas, con un combinado capaz de rendir pero con algo de excesiva veteranía, característica que marca una selección capaz de obtener buenos y malos resultados en los choques disputados desde 2008.
En Nueva Zelanda, los 'Pumas' lucharán por ser de nuevo la sorpesa del Mundial, antes de que tenga lugar en el seno del equipo una cambio de generación, pues una nueva hornada de jugadores espera integrar el combinado en el Torneo de las Tres Naciones de 2012.
- Nueva Zelanda:
El país organizador no tendrá derecho a fallar, después de 24 años sin haberse coronado, como lo hizo por primera vez, en Nueva Zelanda.
Los 'All Blacks' dominan por ahora el rugby mundial tras haberse impuesto recientemente con facilidad el Torneo de las Tres Naciones.
Sin embargo, los neozelandeses tienen la costumbre de ser favoritos a falta de un año para el Mundial, por lo que tendrá que luchar para no sufrir como anfitriones una desilusión como la de 2007, donde cayeron eliminados contra Francia en cuartos de final.
- Sudáfrica:
El vigente campeón está bajo de moral, tras un año 2009 marcado por la suerte. De hecho, los 'Springboks' tocaron fondo este año en el Torneo de las Tres Naciones.
Nombrado en 2008 como entrenador, el técnico Peter de Villiers, primer homber de color que dirige a los jugadores sudafricanos, está bajo una gran presión, pero pese a ello cuenta en apoyarse sobre las cualidades tradicionales y poco espectaculares de los 'Springboks'.
Se trata de la capacidad de conquistar, la defensa y la agresividad.
- Australia:
La revolución prometida por el entrenador neozelandés de Australia, Robbie Deans, todavía se hace esperar. Los 'Wallabies' fallaron una vez más en su tentativa de hacerse con el Torneo de las Tres Naciones en 2010, un título que no obtienen desde 2001.
La intensa competencia interna del rugby a XIII, el lucrativo hemisferio Norte funcionan para Australia como impedimentos para su combinado nacional, que buscará prepararse concienzudamente para romper con los pronósticos en 2011.
- Inglaterra:
'El XV de la Rosa' todavía no ha ganado nada desde que se lograra coronarse en el Mundial de 2003. Pero hay señales de mejoría en 2010, con la emergencia de jóvenes jugadores con mucho talento como Foden y Ashton, y una victoria en Australia en su última gira estival (boreal). Esta tendencia ha de confirmarse.
- Francia:
Como antes de todo Mundial, Francia representa una importante incógnita entre los participantes. Los galos son capaces de firmar actuaciones sólidas, como el 'Grand Chelem' en el Torneo de las Seis Naciones en 2010, y de encajar 83 puntos el pasado junio en Sudáfrica y en Argentina.
Los franceses se esforzarán en el Torneo de las Seis Naciones en 2011 antes de dedicar dos meses para la preparación a la cita mundialista de 2011.
La idea es que Francia construya en ese tiempo un equipo competitivo, capaz de solventar el cansacio de unos jugadores extenuados al final del calendario.
- Irlanda:
Con Declan Kidney, el entrenador con más títulos del país, en el banquillo, los irlandeses se resarcieron del fracaso en el Mundial-2007 con el 'Grand Chelem en el Torneo de las Seis Naciones en 2009.
Actualmente, Irlanda cuenta con un tipo de juego coordinado y bien definido, con destacados líderes como O'Connell, O'Driscoll y algunas estrellas que se encuentran en fase ascendente, como Kearney y Bowe.
- Gales:
El entrenador neozelandés de Gales, Warren Gatland, sabe todo de la tarea que tiene por delante su equipo. La organización de rugby de la región británica está volcada con su selección, pero el ánimo de 2008 ha decaído.
Los galeses tendrán que sacar provecho de su grupo, relativametne abordable, con la excepción de Sudáfrica.
- Escocia:
Sus esfuerzos en el último Torneo de las Seis Naciones no trajo consigo grandes resultados, pero el entrenador Andy Robinson ha encontrado una primera recompensa con una serie de victorias en amistosos este verano (boreal) en Argentina.
Pese a los síntomas de mejora, la tarea que espera al equipo escocés en el grupo B es inmensa, pues se medirá a Argentina y a Inglaterra.
- Italia:
Clasificada en última posición del últimos tres torneos disputados, los transalpinos sólo han ganado a Escocia y Samoa en los tres últimos años.
El entrenador sudafricano Nick Mallet no logró hacer olvidar a su predecesor, el francés Pierre Berbizier.
Entre tanto, Italia sólo ha sido capaz de firmar algunos partidos en los que estuvo cerca de la victoria, aunque el rendimiento siempre fue insuficiente para ganar. Por ello, en Nueva Zelanda luchará por no quedarse con un papel de figurante.
- Argentina:
La selección argentina acudirá a Nueva Zelanada orgullosa por su sorprendente tercera posición en el Mundial de 2007, que se desarrolló en Francia, donde juegan la mayoría de los componentes de los 'Pumas'.
El equipo tendrá que defender la categoríá alcanzada en tierras galas, con un combinado capaz de rendir pero con algo de excesiva veteranía, característica que marca una selección capaz de obtener buenos y malos resultados en los choques disputados desde 2008.
En Nueva Zelanda, los 'Pumas' lucharán por ser de nuevo la sorpesa del Mundial, antes de que tenga lugar en el seno del equipo una cambio de generación, pues una nueva hornada de jugadores espera integrar el combinado en el Torneo de las Tres Naciones de 2012.
- Nueva Zelanda:
El país organizador no tendrá derecho a fallar, después de 24 años sin haberse coronado, como lo hizo por primera vez, en Nueva Zelanda.
Los 'All Blacks' dominan por ahora el rugby mundial tras haberse impuesto recientemente con facilidad el Torneo de las Tres Naciones.
Sin embargo, los neozelandeses tienen la costumbre de ser favoritos a falta de un año para el Mundial, por lo que tendrá que luchar para no sufrir como anfitriones una desilusión como la de 2007, donde cayeron eliminados contra Francia en cuartos de final.
- Sudáfrica:
El vigente campeón está bajo de moral, tras un año 2009 marcado por la suerte. De hecho, los 'Springboks' tocaron fondo este año en el Torneo de las Tres Naciones.
Nombrado en 2008 como entrenador, el técnico Peter de Villiers, primer homber de color que dirige a los jugadores sudafricanos, está bajo una gran presión, pero pese a ello cuenta en apoyarse sobre las cualidades tradicionales y poco espectaculares de los 'Springboks'.
Se trata de la capacidad de conquistar, la defensa y la agresividad.
- Australia:
La revolución prometida por el entrenador neozelandés de Australia, Robbie Deans, todavía se hace esperar. Los 'Wallabies' fallaron una vez más en su tentativa de hacerse con el Torneo de las Tres Naciones en 2010, un título que no obtienen desde 2001.
La intensa competencia interna del rugby a XIII, el lucrativo hemisferio Norte funcionan para Australia como impedimentos para su combinado nacional, que buscará prepararse concienzudamente para romper con los pronósticos en 2011.
- Inglaterra:
'El XV de la Rosa' todavía no ha ganado nada desde que se lograra coronarse en el Mundial de 2003. Pero hay señales de mejoría en 2010, con la emergencia de jóvenes jugadores con mucho talento como Foden y Ashton, y una victoria en Australia en su última gira estival (boreal). Esta tendencia ha de confirmarse.
- Francia:
Como antes de todo Mundial, Francia representa una importante incógnita entre los participantes. Los galos son capaces de firmar actuaciones sólidas, como el 'Grand Chelem' en el Torneo de las Seis Naciones en 2010, y de encajar 83 puntos el pasado junio en Sudáfrica y en Argentina.
Los franceses se esforzarán en el Torneo de las Seis Naciones en 2011 antes de dedicar dos meses para la preparación a la cita mundialista de 2011.
La idea es que Francia construya en ese tiempo un equipo competitivo, capaz de solventar el cansacio de unos jugadores extenuados al final del calendario.
- Irlanda:
Con Declan Kidney, el entrenador con más títulos del país, en el banquillo, los irlandeses se resarcieron del fracaso en el Mundial-2007 con el 'Grand Chelem en el Torneo de las Seis Naciones en 2009.
Actualmente, Irlanda cuenta con un tipo de juego coordinado y bien definido, con destacados líderes como O'Connell, O'Driscoll y algunas estrellas que se encuentran en fase ascendente, como Kearney y Bowe.
- Gales:
El entrenador neozelandés de Gales, Warren Gatland, sabe todo de la tarea que tiene por delante su equipo. La organización de rugby de la región británica está volcada con su selección, pero el ánimo de 2008 ha decaído.
Los galeses tendrán que sacar provecho de su grupo, relativametne abordable, con la excepción de Sudáfrica.
- Escocia:
Sus esfuerzos en el último Torneo de las Seis Naciones no trajo consigo grandes resultados, pero el entrenador Andy Robinson ha encontrado una primera recompensa con una serie de victorias en amistosos este verano (boreal) en Argentina.
Pese a los síntomas de mejora, la tarea que espera al equipo escocés en el grupo B es inmensa, pues se medirá a Argentina y a Inglaterra.
- Italia:
Clasificada en última posición del últimos tres torneos disputados, los transalpinos sólo han ganado a Escocia y Samoa en los tres últimos años.
El entrenador sudafricano Nick Mallet no logró hacer olvidar a su predecesor, el francés Pierre Berbizier.
Entre tanto, Italia sólo ha sido capaz de firmar algunos partidos en los que estuvo cerca de la victoria, aunque el rendimiento siempre fue insuficiente para ganar. Por ello, en Nueva Zelanda luchará por no quedarse con un papel de figurante.
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