Brasil encarriló el pase a las semifinales con una trabajada y agónica victoria sobre la República Checa (3-2), este lunes en el inicio de la tercera ronda del Mundial de voleibol, donde Argentina y España cayeron 3-1 ante Serbia y Bulgaria y están al borde de la eliminación.
En estos últimos grupos de tres equipos, tan sólo el equipo que finalice líder conseguirá seguir en el torneo, por lo que Brasil está a un triunfo de meterse entre los cuatro primeros, si vence a Alemania en su próximo duelo.
El equipo auriverde, doble campeón mundial y gran favorito al título, rozó el desastre y llegó a ir dos sets abajo ante la sorprendente selección checa, pero terminó ganando con un 'tie break' soberbio, donde volvió a brillar Murilo, que ha tomado el relevo de Giba, el mejor jugador de la última década.
Brasil queda así en una posición muy favorable para avanzar ronda, ya que un triunfo de los checos les hubiera dejado contra las cuerdas y con la posibilidad de quedar eliminado el martes, si su rival conseguía derrotar a los alemanes en la segunda fecha del grupo R.
La 'verdeamarela' no brilló, pero su acierto en los momentos decisivos y el acierto en los momentos clave de hombres como Marlon -hasta ahora desaparecido- permitió la agónica victoria en cinco mangas.
En una situación mucho más coprometida queda Argentina, que podría quedar eliminada ya el martes, si los serbios vencen a Rusia en la segunda jornada del grupo P en Florencia.
La albiceleste cayó en cuarto mangas (3-1) contra los balcánicos, que salieron en tromba y en apenas 19 minutos se llevaron ya la primera manga, por 25-15. Los sudamericanos se rehicieron en la segunda (25-21), antes de que la lógica se impusiera y Serbia ganara las dos siguientes (25-22, 25-18).
"Estoy contento porque hemos ganado fácilmente a la que es con los checos la revelación del torneo. Me encanta la manera de jugar de los argentinos, me recuerdan a Yugoslavia en Atlanta en 1996. Nosotros tenemos mucha experiencia y es eso lo que marcó la diferencia", señaló el capitán serbio Nikola Grbic.
En idéntica situación que Argentina queda España, que no pudo hacer nada ante otra de las favoritas, Bulgaria (3-1), que finalizó líder en el 'grupo de la muerte' de la segunda fase, tras superar a Polonia y Brasil.
El búlgaro Matey Kaziyski fue de nuevo la estrella de los suyos y la 'Roja', liderada por Sergio Nonda e Ibán Pérez, fue incapaz de hacer frente al empuje del equipo del este.
El panorama ahora es complicado: España necesita una carambola, que consiste en ganar a Cuba el miércoles y esperar que los caribeños venzan el miércoles a Bulgaria, y que la diferencia de puntos les sea favorable.
En el otro partido del día, Estados Unidos dominó con autoridad a Francia (3-0) y dio un paso importante hacia las semifinales, aunque el martes se verá con el anfitrión y favorito Italia, su gran obstáculo para seguir adelante en el torneo.
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